Ratón Datos de alérgenos, síntomas y tratamiento
Conozca mejor la enfermedad alérgica habitual, los síntomas, las estrategias de control y las posibilidades de pruebas.
¿El paciente es candidato para la prueba de IgE específica?
Obtenga información exhaustiva sobre alérgenos completos y componentes de alérgenos.
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Los alérgenos de ratón pueden provocar el desarrollo de asma y rinitis (también conocida como fiebre del heno), y son una causa importante de síntomas relacionados con el asma en áreas urbanas y suburbanas. El alérgeno principal de los ratones se encuentra en la orina, los folículos pilosos y la caspa; sin embargo, puede llegar a estar en suspensión en el aire y migrar a través de los edificios.1,2 La alergia al ratón es también un problema de salud ocupacional. Una afección llamada alergia a animales de laboratorio (AAL) se observa comúnmente entre el personal que trabaja con animales de laboratorio en industrias farmacéuticas, laboratorios universitarios e instalaciones de cría de animales, donde la prevalencia oscila entre el 11 y el 44 por ciento. La mayoría de las veces causada por ratones y ratas, se sabe que la AAL afecta a técnicos, cuidadores de animales, médicos y científicos. Los síntomas, incluidos el asma alérgica y la rinoconjuntivitis alérgica (que implica reacciones similares a la fiebre del heno y a la conjuntivitis) a veces pueden comenzar hasta dos o tres años después de la exposición inicial.3
El ratón común es un mamífero principalmente nocturno y, aunque generalmente se considera una plaga, algunos se tienen como mascotas.1 Aunque los ratones habitan en el suelo, también son ágiles escaladores, saltadores y nadadores.4 De hecho, pueden dar saltos de 30 cm de altura, sobrevivir a saltos al suelo de 2,5 m e introducirse por aberturas de tan solo 0,6 centímetros de diámetro. Además, son capaces de viajar boca arriba y escalar miles de superficies verticales como madera, metal, malla de alambre, ladrillos, cables y cuerdas.1
En exteriores, los ratones consumen semillas e insectos, pero en interiores comen casi cualquier cosa digerible.4 Dada su agilidad, los ratones pueden infestar una gran variedad de entornos, como hogares, escuelas, hospitales, tiendas y restaurantes, donde también pueden causar daños estructurales.1,5
Los alérgenos se encuentran en la orina del ratón, los folículos pilosos y la caspa; además, se encuentran asentados en el polvo y en suspensión en el aire.1,2 Los roedores pueden infestar innumerables entornos, como hogares, escuelas, hospitales, tiendas y restaurantes, causando síntomas durante todo el año.5 De hecho, en una encuesta sobre las viviendas de EE. UU., el 82 por ciento de los hogares tenían al menos un alérgeno de ratón detectable.1 En general, es más probable que los entornos de viviendas de las zonas urbanas tengan niveles elevados de roedores que los hogares suburbanos.5
Algunas personas con alergia al ratón también pueden experimentar síntomas cuando están expuestas a otros roedores como ratas, cobayas, hámsteres y conejos. Esto se denomina reactividad cruzada y ocurre cuando el sistema inmunitario de su cuerpo identifica las proteínas o componentes de diferentes sustancias como estructuralmente similares o relacionados biológicamente, lo que desencadena una respuesta.3
*Es posible que estos productos no estén autorizados para uso clínico en su país. Consulte a su profesional sanitario para conocer la disponibilidad.
Si usted es alérgico a los ratones, su profesional sanitario le puede recomendar un plan que incluya lo siguiente.5,7,9,10
Su profesional sanitario le puede prescribir uno de los siguientes medicamentos para mejorar los síntomas de la alergia:
Si está con alguien que está sufriendo una reacción alérgica y muestra síntomas de choque, actúe rápidamente. Compruebe si tiene la piel pálida, fría y húmeda; un pulso débil y rápido; dificultad para respirar; confusión y pérdida de conciencia. Haga lo siguiente de inmediato:
La mayoría de la literatura científica se centra en cómo los alérgenos del ratón agravan los síntomas del asma, lo que puede llevar a una reducción de la función pulmonar. Sin embargo, al menos un estudio indica que la alergia al ratón está relacionada con la rinitis (también conocida como fiebre del heno) durante todo el año.6 Los síntomas de la fiebre del heno pueden incluir los siguientes:7
Los síntomas de la alergia a animales de laboratorio (AAL), una enfermedad que se observa comúnmente en los trabajadores de las industrias farmacéuticas, los laboratorios universitarios y las instalaciones de cría de animales, incluyen asma alérgica y rinoconjuntivitis alérgica (que implica reacciones similares a la fiebre del heno y el ojo rosa).8
Los alérgenos de los roedores también pueden causar efectos adversos graves para la salud, pero normalmente es necesaria una cadena de eventos para que esto ocurra. Después de la exposición al alérgeno, algunas personas desarrollan alergia. A continuación, una mayor exposición conduce al desarrollo de asma o rinitis (también conocida como fiebre del heno). Una vez presente una enfermedad respiratoria, las exposiciones adicionales pueden causar síntomas respiratorios exacerbados.1
Junto con su historial de síntomas, las pruebas de punción cutánea o los análisis de IgE específica en sangre pueden ayudarle a determinar si es alérgico a un alérgeno en particular. Si le diagnostican una alergia, su profesional sanitario elaborará un plan de manejo de la alergia junto con usted.
*Es posible que estos productos no estén autorizados para uso clínico en su país. Consulte a su profesional sanitario para conocer la disponibilidad.
La sensibilización a los animales con pelo es común y un factor de riesgo para el desarrollo de la rinitis alérgica y el asma.3 De hecho, los niños asmáticos sensibles y expuestos a altas concentraciones de alérgenos de ratón en el hogar tienen un mayor riesgo de presentar síntomas, exacerbaciones y reducción de la función pulmonar.6 La alergia a animales de laboratorio (AAL), una alergia ocupacional a los roedores, es común entre los trabajadores de laboratorio.3,8 Aunque los síntomas suelen ser leves, la anafilaxia es posible y podría ser potencialmente mortal.8