Manzana Datos de alérgenos, síntomas y tratamiento
Conozca mejor la enfermedad alérgica habitual, los síntomas, las estrategias de control y las posibilidades de pruebas.
¿El paciente es candidato para la prueba de IgE específica?
Obtenga información exhaustiva sobre alérgenos completos y componentes de alérgenos.
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Una de las frutas arbóreas más cultivadas, las manzanas están disponibles en miles de variedades, y son una fuente de hidratos de carbono, vitaminas A y C, y fibra dietética. La inmensa mayoría de las manzanas se producen en China, pero en todo el mundo esta fruta se come fresca y se utiliza para producir alimentos como vinagre, zumo, gelatina, compota de manzana, relleno para tarta, puré de manzana, vino y brandy.1 Aunque la alergia a la manzana es causada por proteínas de la fruta, el nivel de alérgenos en una manzana está influenciado por la variedad de la manzana, las condiciones de almacenamiento y el grado de madurez.2 En un estudio europeo de 2014 en el que se evalúan las tasas de sensibilización a la fruta, la manzana se clasificó como el segundo inductor de sensibilización más frecuente (después del melocotón) con una tasa del 6,5 por ciento.3 Aunque una manzana media pesa de 200 a 250 gramos, tan solo 5 gramos de manzana pueden generar una reacción.2
Los manzanos son originarios de las zonas templadas de ambos hemisferios, y las manzanas se comen principalmente frescas como fruta entera.1,2 Sin embargo, además de utilizarse para productos como vinagres, zumo, gelatina, compota de manzana, relleno para tarta, puré de manzana, vino y brandy, las manzanas son a menudo ingredientes de productos como cereales para el desayuno, barritas de caramelo, yogures, postres, pasteles, tartas y pastas.1,2 Las manzanas también se utilizan en algunos productos de higiene, como jabón, champú y gel de ducha; como extracto de fruta en algunos cosméticos biológicos; y en la pectina, que se emplea como agente gelificante.2,3
Algunas personas con alergia a la manzana también pueden experimentar síntomas al consumir otros alimentos aparentemente no relacionados. Esto se denomina reactividad cruzada y ocurre cuando el sistema inmunitario de su cuerpo identifica las proteínas o componentes de diferentes sustancias como estructuralmente similares o relacionados biológicamente, lo que desencadena una respuesta. Entre las reactividades cruzadas más comunes con las manzanas se incluyen cerezas, melocotones, avellanas, cacahuetes, zanahorias, peras, frambuesas, fresas y moras.3
Si experimenta picor de boca o garganta después de comer manzanas, o bien otras frutas frescas o verduras crudas relacionadas, puede sufrir el síndrome de alergia oral (SAO), a veces llamado síndrome de alergia al polen y los alimentos (PFAS). Esta afección también está causada por la reacción del sistema inmunitario a proteínas o componentes similares que se encuentran en los alimentos vegetales y los pólenes de árboles.6 Es bastante común: el 25 por ciento de los niños con rinitis alérgica (es decir, fiebre del heno) también sufren de SAO.7 Entre las alergias comunes al polen que podrían causar SAO al comer manzanas se incluyen las alergias a pólenes de árboles como el abedul, el aliso y el avellano.3
Una manzana se compone de diferentes tipos de proteínas que tienen características diferentes y que pueden estar asociadas a un riesgo variable de causar reacciones alérgicas graves. Algunas personas con alergia a la manzana pueden comer manzana si se calienta durante un tiempo prolongado (cocinada), ya que las altas temperaturas descomponen las proteínas causantes. Otras proteínas se encuentran principalmente en la piel, por lo que la manzana puede tolerarse si se pela. En el caso de otros pacientes, es posible que sea necesario evitar la manzana en todas sus formas, ya que podría causar un evento grave, también llamado anafilaxia. Su perfil de riesgo específico depende de las proteínas a las que sea alérgico.3
Conocer las proteínas, o los componentes, de cada alérgeno que desencadenan sus síntomas puede ayudarle con su plan de manejo de la alergia. Teniendo esto en cuenta, y basándose en su historial de síntomas, su profesional sanitario puede sugerirle algo llamado prueba de IgE específica de componentes, que puede ayudar a identificar otros pólenes y alimentos a los que podría reaccionar.3
¿Ya tiene sus resultados de la prueba de IgE específica de componentes?
Los resultados de la prueba de componentes incluirán el nombre de los componentes (una serie de letras y números y/o un nombre). El profesional sanitario probablemente revisará los resultados con usted, pero aquí encontrará un desglose resumido que puede utilizar como referencia. Simplemente correlacione los nombres de los componentes con la siguiente lista para ver lo que significan en cuanto al manejo de los síntomas.3
rMal d 1
rMal d 3
MUXF3 (CCD)
Los resultados de las pruebas debe interpretarlos su profesional sanitario, en el contexto de su historial clínico. Su profesional sanitario será responsable del diagnóstico final y de cualquier decisión sobre el posterior manejo de la alergia.
*Es posible que estos productos no estén autorizados para uso clínico en su país. Consulte a su profesional sanitario para conocer la disponibilidad.
Ya que no existe una cura para la alergia alimentaria, su profesional sanitario puede recomendarle un plan que incluya lo siguiente.8-11
Su profesional sanitario le puede recetar uno de los siguientes medicamentos:
Si está con alguien que está sufriendo una reacción alérgica y muestra síntomas de choque, actúe rápidamente. Compruebe si tiene la piel pálida, fría y húmeda; un pulso débil y rápido; dificultad para respirar; confusión y pérdida de conciencia. Haga lo siguiente de inmediato:
La alergia a la manzana oscila entre leve y grave, y puede variar con el tiempo, lo que podría provocar síntomas leves durante un episodio y síntomas graves en otro. Aunque los síntomas de alergia alimentaria pueden comenzar entre unos minutos y varias horas después de la ingestión, la mayoría comienza en las siguientes dos horas.3,4 Los síntomas pueden afectar a la piel, el tracto gastrointestinal, el sistema cardiovascular y el tracto respiratorio, y pueden incluir uno o varios de los siguientes:4,5
Entre los síntomas también se pueden incluir los siguientes, que están asociados al síndrome de alergia oral (SAO), también conocido como síndrome de alergia a los alimentos y el polen (PFAS):6
Junto con su historial de síntomas, las pruebas de punción cutánea o los análisis de IgE específica en sangre pueden ayudarle a determinar si es alérgico a un alérgeno en particular. Si le diagnostican una alergia, su profesional sanitario elaborará un plan de manejo de la alergia junto con usted.
*Es posible que estos productos no estén autorizados para uso clínico en su país. Consulte a su profesional sanitario para conocer la disponibilidad.
Debido a que las reacciones alérgicas a los alimentos son impredecibles y los síntomas van desde las reacciones locales hasta las sistémicas, se recomienda recetar epinefrina a cualquier paciente con alergia alimentaria mediada por IgE.8